Los espectadores observaron la entrevista del presidente durante 60 minutos y notaron una extraña pintura de Trump sentado en una mesa entre algunos de los presidentes republicanos más notables de la historia, incluido Abraham Lincoln. 

La gente comentó en Twitter sobre la extraña decoración de la Casa Blanca que colgaba prominentemente fuera de la Oficina Oval, y algunos compararon el arreglo de los presidentes con los kitsch de la pintura americana de 'Dogs Playing Poker'.

Algunos asumieron que la pieza fue encargada por el propio Trump, considerando su rostro adelgazado y su posicionamiento entre los republicanos influyentes.